miércoles, 8 de octubre de 2008

El corazón que bombea la sangre...

Queridos hermanos, estamos aquí reunidos para rogar al capital nuestro señor. Recordemos que los bancos son el corazón que bombea sangre al sistema y que sin ellos estaríamos todos perdidos.
Capital nuestro que no sé donde estás, santificado sea tu nombre.
Capital, banco, y dirigentes mundiales, las tres manifestaciones de nuestro Dios.
Capital, no soy digno de tener casa; pero una palabra del banco bastará para hipotecarme.
Ya podría yo hablar las lenguas de los hombres y de los ángeles; si no tengo capital no soy nada.
Y ahora recordemos los verdaderos mandamientos:

  1. Apreciarás el Capital sobre todas las cosas.
  2. No tomarás a los bancos en vano.
  3. Te asustarás cuando lo mande el telediario.
  4. Hipotecarás a tu padre y a tu madre, aunque sea solo como aval.
  5. Te endeudarás.
  6. No dejarás de consumir.
  7. No cancelarás jamás tu deuda.
  8. Pagarás impuestos por todo.
  9. No dudarás del sistema.
  10. Te comprarás una tele más grande que la de tu amigo.
Todos estos mandamientos se resumen en dos: Amarás el dinero sobre todas las cosas y desconfiarás del prójimo pues te lo quiere arrebatar.

Amen.

* * *

Ya he oído demasiadas veces estas letanías. A ver si 'casca' ya el sistema y montamos otro, seguro que igual de malo pero al menos novedoso.

1 comentario:

El Puli dijo...

Pues parece que lo van a mantener vivo un tiempo a base de "inyecciones" sacadas de nuestros impuestos. A ver qué pasa después de unos años. Como se termine juntando la debacle del sistema con el final de los combustibles fósiles, lo vamos a fliparrrrrr.